GLORIA FUERTES

Recopilamos aquí el homenaje de los alumnos de 4º E.S.O. del I.E.S. Medina Albaida a Gloria Fuertes para conmemorar el reciente centenario de su nacimiento y los veinte años de su fallecimiento (1917-1998).

¿Por qué Gloria Fuertes? Porque hay aspectos que nos han llamado la atención de su biografía. Porque fue una mujer comprometida con los problemas del ser humano y con la literatura. Porque es más que una escritora infantil.

Su biografía en ideas...


“El dato que mas me ha llamado la atención, sin duda, es el propio estudio de Gloria Fuertes en las clases debido a que no se suelen estudiar autores tan recientes, eso me hace pensar que lo que estamos estudiando no es algo del pasado sino que esta continuando hacia el futuro.”

AUTOBIOGRAFÍA
Gloria Fuertes nació en Madrid
a los dos días de edad,
pues fue muy laborioso el parto de mi madre
que si se descuida muere por vivirme.
A los tres años ya sabía leer
y a los seis ya sabía mis labores.
Yo era buena y delgada,
alta y algo enferma.
A los nueve años me pilló un carro
y a los catorce me pilló la guerra;
A los quince se murió mi madre, se fue cuando más falta me hacía.
Aprendí a regatear en las tiendas
y a ir a los pueblos por zanahorias.
Por entonces empecé con los amores,
-no digo nombres-,
gracias a eso, pude sobrellevar
mi juventud de barrio.
Quise ir a la guerra, para pararla,
pero me detuvieron a mitad del camino.
Luego me salió una oficina,
donde trabajo como si fuera tonta,
-pero Dios y el botones saben que no lo soy-.
Escribo por las noches
y voy al campo mucho.
Todos los míos han muerto hace años
y estoy más sola que yo misma.
He publicado versos en todos los calendarios,
escribo en un periódico de niños,
y quiero comprarme a plazos una flor natural
como las que le dan a Pemán algunas veces.

     Gloria Fuertes se retrató en su poesía autobiográfica como solitaria, religiosa, enamoradiza, feminista, fumadora empedernida, pacifista, castiza y poeta. Siempre se definió como "autodidacta y poéticamente desescolarizada". Su interés por las letras comienza a la temprana edad de cinco años, cuando ya escribía y dibujaba sus propios cuentos. Publica su primer poema con tan solo catorce años en 1932, bajo el nombre de Niñez, juventud, vejez… persiguiendo desde joven la edición de sus escritos.

“A los nueve años me pilló un carro
y a los catorce me pilló la guerra;
a los quince se murió mi madre,
se fue cuando más falta me hacía…”

A los 14 años su madre le matriculó en el Instituto Profesional de la Mujer. Pero ella que no quería ser ni niñera, ni modista, como su madre; ella se matriculó en Gramática y Literatura.
Su madre no podía entender su gran afición hacia la poesía.

Cuando mi madre me veía con un libro, me pegaba. Nadie de mi familia me dijo nunca "escribe, hija, escribe, que lo haces bien...". Nadie. No tengo nada que agradecer a mi familia. Pero cuando se quiere una cosa, aunque tu familia no te ayude, se consigue. Sí vales de verdad y quieres algo con todas tus ganas, sales adelante seguro.”

Cuando su madre fallece Gloria se da cuenta de la importancia de la vida.

“Mi primer juguete, una máquina de escribir
(alquilada) con la que trabajaba
copiando direcciones,
me pagaban un céntimo por cada sobre…”

A finales de la década de los 40, formó junto a otras escritoras un grupo llamado “Versos con faldas”, cuyo único objetivo era fomentar la lectura ofreciendo recitales en distintos cafés.

Entre mediados de los 50 y principios de los 60 decidió continuar formándose, y esto lo hizo estudiando inglés y biblioteconomía. Y allí fue donde conoció a la que sería el gran amor de su vida: la hispanista estadounidense Phyllis Turnbull, con la que estuvo manteniendo una relación durante quince años.

“La primera vez que entré en una universidad fue para dar clases en ella”.

Cuando sus amigos la visitaban en su piso, cerca de la Castellana, en Madrid, a menudo le llevaban una botella de whisky o un jugoso lenguado, para que ella no gastara. Estos mismos amigos se quedaron atónitos cuando Gloria murió, y supieron que tenía cien millones de pesetas en el banco, un dineral que legó en su testamento a La Ciudad de los Muchachos. Devolvía así a los niños la fortuna que consiguió gracias a ellos.
La Ciudad de los Muchachos es un “pueblo” que creó como una alternativa a la educación que dan en los centros de menores. Un lugar donde la función, enseñar, hace la forma. Una ciudad a escala de niños donde todos tienen voz y voto. Con este proyecto la poeta siempre estuvo muy involucrada.
Reclamó los derechos de las mujeres empezando por el derecho a leer, a escribir, a trabajar o a ser poeta en un momento histórico en el que estaban reducidas al espacio doméstico. Hizo numerosos poemas donde aún siendo para niños tenían cierto trasfondo feminista.

Fue apreciada y estudiada en el extranjero, la mayoría de los trabajos críticos sobre Gloria Fuertes proceden del hispanismo norteamericano. En Estados Unidos hay hasta 12 estudiosos especializados en ella y se han realizado allí numerosas tesis doctorales.

Su retrato fue incorporado por la Norwegian Air Shuttle a uno de sus Boeing 737-800.



NUESTRA BREVE ANTOLOGÍA

Al borde                                                            
Soy alta;
en la guerra
llegué a pesar cuarenta kilos.
He estado al borde de la tuberculosis,
al borde de la cárcel,
al borde de la amistad,
al borde del arte,
al borde del suicidio,
al borde de la misericordia,
al borde de la envidia,
al borde de la fama,
al borde del amor,
al borde de la playa,
y, poco a poco, me fue dando sueño,
y aquí estoy durmiendo al borde,
al borde de despertar.

Mi vecino
El albañil llegó de su jornada
con su jornal enclenque y con sus puntos.
Bajaron a una tienda a por harina,
hicieron unas gachas con tocino,
pusiéronlo a enfriar en la ventana,
la cazuela se cayó al patio.
El obrero tosió:
– Como Gloria se entere,
esta noche cenamos Poesía-.


****


Nacer, vivir, crecer, saltar,
reír, chillar, mentir,
aprender, amar, estudiar,
brincar, jugar, correr,
reír, reír… ¡niñez!
Hablar, pensar, cantar,
moverse, andar,
jugar a amar,
cambiarse de lugar,
sin quietud…¡juventud!
Sufrir, llorar, gemir,
sentir, pensar, no vivir,
quietud, resignación,
desolación…
tristeza, dejadez… ¡vejez!


                                                                       ****

Nací para poeta o para muerto,
escogí lo difícil
—supervivo de todos los naufragios—,
y sigo con mis versos,
vivita y coleando.
Nací para puta o payaso,
escogí lo difícil
—hacer reír a los clientes desahuciados—,
y sigo con mis trucos,
sacando una paloma del refajo.
Nací para nada o soldado,
y escogí lo difícil
—no ser apenas nada en el tablado—,
y sigo entre fusiles y pistolas
sin mancharme las manos.

                                               ******

CUANDO TE NOMBRAN
Cuando te nombran,
me roban un poquito de tu nombre;
parece mentira,
que media docena de letras digan tanto.
Mi locura seria deshacer las murallas con tu nombre,
iría pintando todas las paredes,
no quedaría un pozo
sin que yo asomara
para decir tu nombre,
ni montaña de piedra
donde yo no gritara
enseñándole al eco
tus seis letras distintas.
Mi locura sería,
enseñar a las aves a cantarlo,
enseñar a los peces a beberlo,
enseñar a los hombres que no hay nada,
como volverme loco y repetir tu nombre.
Mi locura sería olvidarme de todo,
de las 22 letras restantes, de los números,
de los libros leídos, de los versos creados.

*********

                          “Soy sólo una mujer”
Soy sólo una mujer y ya es bastante,
con tener una chiva, una tartana
un “bendito sea Dios” por la mañana
y un mico en el pescante.
Yo quisiera haber sido delineante,
o delirante Safo sensitiva
y heme, aquí,
que soy una perdida
entre tanto mangante.
Lo digo para todo el que me lea,
quise ser capitán, sin arma alguna,
depositar mis versos en la luna
y un astronauta me pisó la idea.
De paz -por esos mundos quise ser traficante
-me detuvieron por la carretera­
soy sólo una mujer, de cuerda entera,
soy sólo una mujer y ya es bastante.





Tres eran tres,
las reinas de oriente, tres eran tres
ya son suficientes
-¿Y qué pasaría si en vez de reyes fueran reinas?
- ¿cómo serían les daría tiempo a ir a todas las casas?
-claro que sí una reina es igual de guay que un rey.
-¿Y qué harían? ¿cómo irían vestidas?
- ¡jugamos!

Ingredientes:
Dos Pendientes,
una toalla de capa,
un visillo de faldilla,
un gorro de piel de ardilla,
un collar de calderilla,
una corona de espuma y una pluma,
y ... lo haga quien lo haga puede vestirse de Reina Maga
                               ****

CARTA DE LA EME

Manolo mío:
Mi madrileño marchoso,
maduro melocotón maleable,
macedonia mascaré mañana,
mortadela moscatel mío.
Madrugaré maestro
-me manipulas-
Manolo, macho mío,
mándote majuelas, magnolias
maíz, mijo,
-me matas, majo-.
Mi madre, me maravilla
masculla melosa: Manolo, Manolo...
Mágico malestar me maltrata
madreperlo mío,
mi manera machacona,
mi matriz maternal me manda
mantener maceta menta.
Majo mío, mujeriego multado
máscate mi murria.
Mersi, merecido mechón me mandas,
medito, meo.
Meandro mío
mi medieva mejilla manifiesta miente mi mente
milenarios milagros,
mi mimosa mímica
mima mi mística misión.
Mirlo mío, mozo molletudo
mófate modorro
mi monólogo monserga muere
mi murga mutilada
mi macarrónica misiva muéstrate mi macilenta marcha.
Moqueo.
Mándame música, muslo mío. Más música.
Muchas marmitas.

                               ****

Todo asusta
Asusta querer mucho y que te quieran (…)
asusta ser feliz, asusta el fuego,
sobrecoge la paz, se teme algo,
asusta todo trigo, todo pobre,
lo mejor, no sentarse en una silla.
                                                                    
                                                                     *****

YA VES QUE TONTERíA

Ya ves qué tontería,
me gusta escribir tu nombre,
llenar papeles con tu nombre,
llenar el aire con tu nombre;
decir a los niños tu nombre,
escribir a mi padre muerto,
y contarle que te llamas así.
Me creo que siempre que lo digo me oyes.
Me creo que da buena suerte.
Voy por las calles tan contenta,
y no llevo encima nada más que tu nombre.




  SOY ALEGRE
Soy alegre y afable en el invierno,
en el verano piso por la playa,
en el otoño pliso los visillos,
estoy como una cabra en primavera.

La ciudad me da asco.
No así el río.
Los ojos mudos de los hombres pasan.

Sólo se cose a mí este silencio
que disfruto cuando las bestias duermen.

Soy más bien buen carácter,
y nadie dice que desde que nací yo duermo sola.

  
NO DEJAN ESCRIBIR
Trabajo en un periódico
pude ser secretaria del jefe
y soy solo mujer de la limpieza.
Sé escribir, pero en mi pueblo,
no dejan escribir a las mujeres.
Mi vida es sin sustancia,
no hago nada malo.
Vivo pobre.
Duermo en casa.
Viajo en Metro.
Ceno un caldo
y un huevo frito, para que luego digan.
Compro libros de viejo,
me meto en las tabernas,
también en los tranvías,
me cuelo en los teatros
y en los saldos me visto.
Hago una vida extraña.


ES INÚTIL
 Inútil que a estas fechas
nos empiece a dar pena de la rosa y el pájaro,
inútil que encendamos velas por los pasillos,
inútil que nos prohíban nada,
hablar, por ejemplo,
comer carne,
beber libros,
bajarnos sin pagar en el tranvía,
querer a varios seres,
fumar hierbas,
decir verdades,
amar al enemigo.
Inútil es que nos prohíban nada.
En los diarios vienen circulares,
papeles hay pegados en la esquina
que prohíben comer pájaros fritos.
¡Y no prohíben comer hombres asados
con dientes de metralla, comer hombres desnudos!
¿Por qué prohíben pájaros los mismos que consienten
ejecutar el séptimo y el quinto mandamiento?
Tampoco han prohibido los niños en Corea
y se los sigue el hombre comiendo en salsa blanca.
La "Protectora de Animales" está haciendo el ridículo.
Tampoco han prohibido comer las inocentes pescadillas,
los tiernos y purísimos corderos,
las melancólicas lubinas,
las perdices...
Y qué me dices
de "Mariquita Pérez"
que la compran abrigos de trescientas pesetas
habiendo tanta niña sin muñeca ni ropa.
Los enfermos trabajan,
los ancianos ejercen,
el opio en tal café puede comprarse,
la juventud se vende.
Todo esto está oficialmente permitido.
Comprended y pensad: nada se arregla
con tener "buenos sentimientos",
hay que tener arranques
y ganas de gritar:
-¡Mientras haya guerras comeré pájaros fritos!


                    Soy como esa isla que ignorada,
late acunada por árboles jugosos,
en el centro de un mar
que no me entiende,
rodeada de nada,
sola sólo.
Hay aves en mi isla relucientes,
y pintadas por ángeles pintores,
hay fieras que me miran dulcemente,
y venenosas flores.
Hay arroyos poetas
y voces interiores
de volcanes dormidos.
Quizá haya algún tesoro
muy dentro de mi entraña.
¡Quién sabe si yo tengo
diamante en mi montaña,
o tan sólo un pequeño
pedazo de carbón!
Los árboles del bosque de mi isla,
sois vosotros mis versos.
¡Qué bien sonáis a veces
si el gran músico viento
os toca cuando viene el mar que me rodea!
A esta isla que soy, si alguien llega,
que se encuentre con algo es mi deseo;
manantiales de versos encendidos
y cascadas de paz es lo que tengo.
Un nombre que me sube por el alma
y no quiere que llore mis secretos;
y soy tierra feliz —que tengo el arte
de ser dichosa y pobre al mismo tiempo.
Para mí es un placer ser ignorada,
isla ignorada del océano eterno.
En el centro del mundo sin un libro
sé todo, porque vino un mensajero
y me dejó una cruz para la vida
para la muerte me dejó un misterio.

                                     ***


En el árbol de mi pecho hay
un pájaro encarnado.
Cuando te veo se asusta,
aletea, lanza saltos.
En el árbol de mi pecho hay
un pájaro encarnado.
Cuando te veo se asusta,
¡eres un espantapájaros!

                     *******************
La gente corre tanto
porque no sabe dónde va,
el que sabe dónde va,
va despacio,
para paladear
el “ir llegando”.
***********************
Kikirikí,
estoy aquí,
decía el gallo
Colibrí.

El gallo Colibrí
era pelirrojo,
y era su traje
de hermoso plumaje.

Kikirikí.
Levántate campesino,
que ya está el sol
de camino.

Kikirikí.

Levántate labrador,
despierta con alegría,
que viene el día.

Kikiriki.

Niños del pueblo
despertad con el ole,
que os esperan en el «cole».
El pueblo no necesita reloj,
le vale el gallo despertador.


Algo sucede
Algo me pasa que en mi pecho existe.
Vuelan hormigas y discurren peces.
Suena la sangre y el tambor convoca.
Hay un incendio cerca de mi pulso.
De nuevo el tigre lanza su mensaje.
Tiene mi cama sed de otra figura.
Vuelven las venas a cantar presagios.
Torna el insomnio con sus mil disfraces.
Lavo mis manos para hacerlas suyas,
peino el cabello, río a las vecinas.
Y cuanto miro se convierte en agua.

¡Esto es amor y lo demás miseria!  
******

¡Pobre Burro!

El burro nunca dejará de ser burro.
Porque el burro nunca va a la escuela.
El burro nunca llegará a ser caballo.
El burro nunca ganará carreras.
¿qué culpa tiene el burro de ser burro?
En el pueblo del burro no hay escuela.
El burro se pasa la vida trabajando,
tirando de un carro,
sin pena ni gloria,
y los fines de semana
atado a la noria.
El burro no sabe leer,
pero tiene memoria.
El burro llega el último a la meta,
¡pero le cantan los poetas!
El burro duerme en cabaña de lona.
No llamar burro al burro,
llamarle “ayudante del hombre”
o llamarle persona.


******
                                  La Pobre
Soy tan pobre tan pobre,
que no tengo ni madre.
Soy tan pobre tan pobre,
que no tengo ni nadie.
Que no tengo ni abrigo
que llevarme a los hombros.
No tengo ni belleza
que llevarme a los hombres.
Soy tan pobre tan pobre,
que no tengo ni labios
que llevarme a la boca.
¿Tenéis una mirada de ternura?
¿Os sobra algo de vino en la copa?
¡Un poquito de pez,
que tengo hambre..!
Aunque sólo sea una mirada,
soy tan pobre, tan pobre,
que no tengo una sábana blanca…
pero si no la tengo no te vayas.
No tengo un hombro donde llorar a gusto.
No tengo un hombre donde zurcir palabras.
Unas manos, por caridad,
para las mías largas,
que tengo a mi corazón enfermo
y no tengo que darle una cucharada.


Como un volcán dormido de mentira
—parezco al parecer tan descansada—.
Un ocio agotador que así me enciende,
brotan de mi costado las palabras.
Sudo tinta y tengo sed, sed tengo,
mucha sed de manos enlazadas.
Por la punta del monte de mis senos
por la punta del lápiz va la lava...

Va balada a tus pies o bien protesta,
en una piedra al sol, arrodillada
y la pasión del hombre se me representa;
veo celdas con rejas, hospitales sin camas,
sabios con atómicas, analfabetos con ayuda de cámara,
viudas con marido, casos sin casa,
niños crueles, perras apedreadas,
la traición de un amigo, la destrucción de un alma.
¡No puedo más!     ...Me levanto y dicen:

—Ahí va Gloria la vaga.
—Ahí va la loca de los versos, dicen,
la que nunca hace nada.